Un poco de entrenamiento antes de cambiar valores reales.
Muchos aspectos en la configuración de un ordenador requieren una breve visita a lo que coloquialmente llamamos BIOS, aunque las últimas generaciones de PCs ya incluyen la tecnología UEFI. Ahora, tanto los manuales como los sitios oficiales sólo poseen información básica sobre esta sección, y al ingresar por primera vez, la experiencia puede ser intimidante. Por suerte, la gente de Lenovo ofrece a su PC BIOS Simulator, que a pesar de estar enfocado en los modelos de la compañía, resulta muy útil como práctica.
Si tengo que pensar en una razón por la cual un usuario se vería obligado a ingresar al BIOS de su ordenador, es la modificación en el orden de inicio
para sus unidades. La mayoría de las placas base incluyen un «boot
menu» que nos permite elegir a mano la unidad, pero si el cambio debe
ser permanente, entrar al BIOS es inevitable.
Lo mismo sucede a la hora de modificar la memoria RAM compartida para los chips de vídeo integrado (la opción «Auto» suele ser suficiente, pero algunas apps requieren valores fijos), o valores generales de rendimiento, como hacer overclocking o ir en la otra dirección. El problema principal es siempre el mismo: El BIOS/UEFI no es un lugar para novatos.
Si bien es posible regresar a la configuración de fábrica fácilmente,
algunos sistemas ahogan al usuario en valores de configuración. Si te
sientes intimidado por un BIOS, entonces, ¿por qué no practicas en un simulador?
Cómo navegar en el BIOS/UEFI de un PC con PC BIOS Simulator
Podemos cambiar casi todo… sin romper nada
Aquí es cuando sale al rescate la gente de Lenovo con su PC BIOS Simulator.
La página incluye un total de 397 simulaciones para ordenadores
portátiles, AIO y tradicionales que la compañía vende o vendió en algún
punto. Desde el primer momento comprendemos que PC BIOS Simulator no es una herramienta destinada al usuario final,
sino a quienes se encargan de brindar soporte técnico post-venta. Si un
usuario necesita ingresar al BIOS de su portátil, la referencia visual
para el asistente al otro lado de la línea será extremadamente valiosa.
No todos los sistemas operativos se llevan bien con UEFI. El modo legacy es más útil de lo que parece.
Sin embargo, nada nos impide ingresar a la lista, elegir un modelo, y
experimentar una simulación de su BIOS. Todos poseen un perfil bastante
«clásico» si se quiere, y la tecnología cambia dependiendo de qué tan
antiguo sea el ordenador. Algunos de los BIOS fueron hechos por Insyde o
Phoenix, mientras que otros directamente dicen «Lenovo».
Aquí encontramos el valor para ajustar la memoria de vídeo, pero antes requiere un cambio en el perfil de seguridad
En resumen: Si tienes (o trabajas con) sistemas Lenovo, el PC BIOS Simulator
debería ser parte de tus favoritos. Si usas un portátil o una placa
base diferente y nunca has ingresado a un BIOS antes, esto servirá como
entrenamiento para saber en dónde se encuentran algunas opciones. ¡Haz la prueba!
A lo largo de esta semana se lanzará un firmware para la Raspberry Pi4 que reducirá la temperatura de la placa entre 3 y 5 °C.
Viene el verano, y con ello la posibilidad de que nuestros
dispositivos electrónicos favoritos puedan sufrir un colapso por
alcanzar ciertas temperaturas. La Raspberry Pi 4, que se anunció el pasado lunes, aumenta la memoria a 4GB, presenta USB 3.0 y agrega soporte para pantallas 4K duales.
Sin embargo, durante estos primeros días de disponibilidad de la
placa, muchos usuarios se están dando cuenta que la temperatura de la
placa alcanza una gran temperatura al momento de estar ejecutando
múltiples subprocesos.
Pues bien, para bajar la temperatura promedio, la Raspberry Pi Foundation lanzará
esta misma semana una actualización de firmware para la placa, mediante
la cual se estima de que podría descender la temperatura de 3 a 5 °C en la mayoría de las condiciones.
De inicio la actualización estará disponible a través de los foros de
la Rapberry Pi y un poquito más adelante como parte de la imagen del
sistema, cuando ya haya sido probada por un gran conjunto de usuarios.
Las primeras pruebas con este firmware ya se han sucedido, y parece
contar con un efecto notable en el rendimiento al reducir la duración de
la velocidad del funcionamiento del procesador.
Es, sin duda, una gran noticia, dado que independientemente de que
usemos procesos múltiples, es conveniente tener un firmware instalado
que pueda evitar que la placa alcance temperaturas que puedan afectar
negativamente a su funcionamiento.
Veinte
años después de su lanzamiento original, hoy regresa uno de los juegos
de terror más icónicos para PlayStation 4, Xbox One y PC.
La comisaría de Raccoon City, la ciudad ficticia donde transcurre Resident Evil, es uno de los escenarios más icónicos de toda la historia de los videojuegos.
Aquellos que hace veinte años las pasaron canutas mientras recorrían
sus estrechos pasillos llenos de zombis, quizá todavía hoy se
estremecerán al recordar las muchas “sorpresas” que aguardaban en aquel
edificio. Con Resident Evil 2, Capcom no tan solo logró
consolidar el género del terror en los videojuegos, sino que también
creó un decorado virtual que sigue grabado a fuego en la memoria de
quienes lo sufrieron. Dos décadas después la compañía japonesa
abre de nuevo las puertas de su comisaría a toda una nueva generación de
jugadores con el lanzamiento del ‘remake’ de este clásico para PlayStation 4, Xbox One y PC.
Lo primero es lo primero; este “nuevo” Resident Evil 2 es un ‘remake’, ¡pero vaya uno!
En esencia, el juego es el mismo que hace veinte años, es decir, la
historia de Leon Kennedy y Claire Redfield en su intento de escapar de
la citada comisaría, pero el título que hoy llega a las tiendas no se
contenta únicamente con unas leves mejoras. Lo primero que llama la atención es el renovado apartado visual,
un despliegue gráfico espectacular que aprovecha y exprime la potencia
de las actuales consolas. Solo hace falta ver cualquiera de los
tráileres del juego para constatar que sí, es la misma historia, pero
parece rabiosamente nueva.
El modelado y las animaciones de los protagonistas, el enfermizo nivel
de detalle de los zombis y demás criaturas, la maravillosa —y
angustiosa— iluminación, los miles de detalles que pueblan cada rincón
de escenario. Podríamos seguir alabando el tremendo acabado gráfico de este Resident Evil 2,
aunque sería un poco absurdo hacerlo cuando a partir de hoy YouTube se
va a ver inundada de ‘gameplays’ sobre el juego. Ahora bien, es
necesario destacar cuál ha sido la aproximación de Capcom con respecto a
esta puesta a día, ya que no se trata únicamente de un envoltorio
bonito; el juego dirigido por Kazunori Kadoi y Yasuhiro Anpo logra encontrar ese equilibrio entre respetar la obra original y actualizarla al mismo tiempo.
La tecnología de hoy permite hacer cosas que hace veinte años eran
impensables. Así, mientras en el título original el jugador tenía que
lidiar con las pobres perspectivas que ofrecían los fondos en dos
dimensiones de la época, ahora puede escudriñar con total libertad
cualquier detalle del escenario gracias a la cámara libre. El cambio
en la perspectiva y el hecho de que el jugador pueda mover libremente la
cámara cambia casi por completo toda la jugabilidad.
El famoso enfrentamiento contra el Licker, uno de los
monstruos más terroríficos que ha dado el medio interactivo, es un buen
ejemplo de cómo la tecnología puede cambiar también la forma de jugar.
Mientras en el juego original encontrarse con esta horrible criatura
casi siempre acababa de dos formas posibles (escapando o vaciando el
cargador de la escopeta), ahora este encuentro puede desarrollarse de
forma totalmente diferente si uno es capaz de moverse por el escenario
sin hacer demasiado ruido. Es algo que ya se podía hacer en el juego
original, pero que gracias las mejoras en el control del ‘remake’ este
encuentro es mucho más fácil a la vez que arriesgado.
Por el contrario, también hay aspectos en los que el juego no ha
cambiado nada, y el caso más claro son los rompecabezas. Y es que como
hijo de los Resident Evil más clásicos que es, este ‘remake’ está trufado de esos puzles anticuados con llaves, cetros, joyas y medallones que tan absurdos parecen hoy en día.
Sin embargo, no desentonan tanto como uno podría esperar. En realidad,
estas idas y venidas con objetos absurdos son más una excusa para hacer
que el jugador tenga que moverse de un lado para otro, que puzles en el
sentido estricto. No se trata de una concesión a ese retorno a los
orígenes, simplemente, el juego no sería lo mismo sin sus puzles de la vieja escuela. De hecho, se podría decir que toda la comisaria de Raccoon City es un enorme rompecabezas, es más, uno excelente diseñado, en el que cada habitación es un nodo que conecta con el restoy, esto, es casi tan importante como todos sus muertos vivientes.
Evidentemente, el paso del tiempo también ha afectado a los zombis. Ahora no tan solo son más terroríficos gracias a su representación hiperrealista, sino que también son más resistentes.
Harán falta unos cuantos disparos a la cabeza para tumbar al más débil
de ellos, pero también es posible optar por otras estrategias, como
disparar a las piernas para que caigan al suelo. Los desmembramientos
están a la orden del día casi tanto como el poco disimulo de Capcom a la
hora de jugar con el gore más salvaje.
El de Resident Evil 2 no es el mismo tipo de terror cinematográfico de Resident Evil 7, pero sí uno basado en la preocupación constante por la falta de munición. La gestión del inventario
sigue siendo otra de las claves de un juego, un sistema de mecánicas
que veinte años después sigue funcionando como un reloj suizo y que se
disfruta cuando, a pesar de todas las dificultades, tienes sensación de
control.
Resident Evil 2 consigue dar miedo gracias a la cuidada representación visual de su mundo y sus criaturas,
transmitir esa sensación de agobio constante a través de sus mecánicas
de juego, pero no hay que hay que olvidar aquello que verdaderamente
aterroriza, el sonido de unos pasos a nuestras espaldas. Que se activen
todas nuestras alarmas porque hemos escuchado un ruido es algo constante
en el juego. El sonido binaural del juego, especialmente si
jugamos con cascos, consigue que sintamos que siempre estamos rodeados
de posibles peligros y este es otro los puntos clave en los que Capcom
no ha escatimado recursos.
Para conseguir que este retorno a la comisaria de Raccoon City sea
del agrado tanto de los nuevos públicos como de los veteranos, la
compañía japonesa ha implementado tres niveles de dificultad que
intentan adaptarse tanto a aquel jugador sin experiencia en la saga,
como a aquel que busca un reto (y guarda partida con cintas de tinta).
Con sus dos rutas alternativas el juego puede alcanzar las 20 horas de duración,
un tiempo en el que despliega su absurdo argumento de apocalipsis zombi
propio de las peores/mejores películas de serie B, pero también sus
equilibradas mecánicas de juego, rotundas y adictivas como pocas. En una
época en la que la cultura popular constantemente recurre al pasado,
podría parecer que este Resident Evil 2 no deja de ser otro ‘remake’,
pero lo cierto es que otro gallo cantaría si todos fueran así de
contundentes.
El
‘remake’ de Resident Evil 2 consigue un equilibrio perfecto entre el
respeto hacia aquello que hizo grande al juego original y la
espectacular puesta al día de su presentación visual y sonora.
Como sabemos, con una Raspberry Pi podemos hacer multitud de cosas.
La podemos convertir en una consola retro, un mini ordenador,
reproductor en Streaming… Su pequeño tamaño hace que sea muy interesante
para transportar o guardar en cualquier lugar. Además, el precio
económico también invita a muchos aficionados a la informática y las
nuevas tecnologías a adquirir una. En este artículo vamos a explicar qué
se necesita para convertir Kali Linux y Raspberry Pi en un kit de
hacking ético.
Kali Linux y Raspberry Pi
Kali Linux es una de las distribuciones de Linux más famosas cuando
se trata de seguridad y hacking ético. Ofrece una gran variedad de
funciones relacionadas con este ámbito. Además, podemos instalarlo en
una Raspberry Pi y crear un kit de hacking ético fusionándolos.
Lo interesante de Raspberry Pi es que puede ejecutar Kali Linux de
manera nativa. Es decir, podemos instalar el sistema operativo sin
necesidad de utilizar una máquina virtual. Esto permite una gran
libertad y poder utilizar todas las herramientas disponibles.
Entre otras cosas, con Kali Linux y Raspberry Pi podríamos pruebas
para comprobar la fortaleza de contraseñas Wi-Fi, realizar ataques de
fuerza bruta de autenticación, pruebas de penetración, etc.
Por tanto, si fusionamos Kali Linux y Raspberry Pi podemos lograr un
kit de hacking ético bastante interesante. Para ello, eso sí,
necesitamos algunas cosas básicas. Algunas herramientas con las que
poder poner en práctica todo lo que hemos comentado y mucho más.
Qué necesitamos para crear un kit de hacking ético
Lo primero que necesitamos es contar con una Raspberry Pi. Podemos ver el último modelo que está disponible en Amazon.
También será necesario tener una tarjeta de comando y control Wi-Fi
para conectar el dispositivo automáticamente a un punto de acceso. La
versión de Raspberry Pi 3 ya trae incorporada una tarjeta Wi-Fi.
Una tarjeta de ataque Wi-Fi que sea compatible con Kali Linux. Debe de ser una tarjeta que admita modo monitor y de esta forma detectar redes Wi-Fi.
Además, tenemos que contar con una tarjeta SD que
será donde se aloje el sistema operativo. Una fuente de alimentación
para conectar la Raspberry Pi. Opcionalmente también podremos tener un cable Ethernet, que dependerá de lo que busquemos.
Por otra parte, otros dos componentes opciones pueden ser un teclado Bluetooth, para poder interactuar por ejemplo si vamos a usarla en una televisión, así como un estuche protector.
Un aspecto vital y básico es contar con Kali Linux.
Lo podemos descargar de su página oficial. Tendremos que crear la imagen
ISO en la tarjeta SD. Una vez hecho esto, tendremos que instalarlo.
Kali Linux está optimizado para Raspberry Pi 3. Podemos iniciarlo en
modo admin usando root como nombre de usuario y toor como contraseña.
Nuestro consejo es cambiar esa clave tan pronto como sea posible.
Una vez tengamos todo listo e instalado, es importante actualizar a la última versión.
Esto hay que aplicarlo tanto al sistema operativo como a las diferentes
herramientas que tengamos. De esta forma evitamos posibles problemas
que puedan comprometer la seguridad, así como asegurar el buen
funcionamiento.
Por último, antes de iniciar ninguna prueba necesitamos comprobar que
todo funciona correctamente. Ver que la tarjeta de red Wi-Fi funciona,
por ejemplo.
En RedesZone tenemos una serie de manuales de Raspberry Pi donde encontrar mucha información interesante.
Buenas noticias para los usuarios de Raspberry Pi que han instalado o
tienen pensado instalar una pantalla táctil a su Raspberry Pi. La versión 4.21 de Linux ya incluye soporte nativo para la pantalla táctil oficial de Raspberry Pi, dentro del propio Kernel de Windows. Lo ha añadido el desarrollador Dimitri Torokhov, y apenas requiere 200 líneas de código.
Hasta ahora, para utilizar la pantalla táctil oficial de Raspberry Pi había
que usar una versión personalizada de Raspbian, la versión de Debian
para Rapsberry Pi, o utilizar un driver o un parche externo para añadir
soporte de la pantalla táctil.
Al incluir soporte nativo para la pantalla táctil oficial de Raspberry Pi en Linux 4.21, se eliminan todos los problemas de compatibilidad e integración de este hardware. A partir de ahora, se podrá utilizar la pantalla táctil en cualquier Raspberry Pi que tenga instalado un sistema operativo basado en el kernel de Linux 4.21, sin necesidad de usar drivers o parches externos.
Es una gran noticia para el ecosistema Raspberry Pi, porque cada vez más proyectos requieren el uso de una pantalla táctil, en muchos casos con aplicaciones paralelas al propio smartphone, e incluso con la fabricación de tu propio smartphone con Raspberry Pi.
Gracias al soporte oficial de la pantalla táctil del Rapsberry Pi en Linux 4.21,
se podrán poner en marcha de forma más sencilla proyectos como una
tablet DIY, mandos de control para robots, drones o coches a control
remoto, control de sensores y dispositivos inteligentes, etc.
La pantalla táctil oficial de Raspberry tiene un tamaño de 7 pulgadas y una resolución de 800x480 píxeles. Está pensada para colocar la Raspberry Pi detrás de ella, y así crear tu propia tablet. Tiene un precio de 79 euros en Amazon.